NO SABÍA LO QUE QUERÍA HACER, PERO SABÍA LA MUJER EN LA QUE QUERÍA CONVERTIRME.- Diane Von Fürstenberg


Recuerdo cuando era niña decía que quería que mi nombre lo conociera mucha gente (y no precisamente por un video porno). Nunca soñé con ser famosa, yo quería impactar la vida de los demás, lo que no sabía era cómo. Hoy, unos cuantos años después, todavía no sé qué hacer, pero sí tengo muy claro el tipo de mujer que quiero ser.

Tuve todo tipo de trabajos, fui secretaria en una floristería, bartender, mesera, cajera en diferentes bares, trabajé en ventas (la cosa que más odio del mundo), fui servicio al cliente y digitadora en distintos “call centers”, hacílo que fuese necesario dentro de la ley, para mantenerme, pero siempre le faltaba algo a mi vida. Como ya saben mi sueño de estar en TV por razones de estereotipos no pudo ser materializado y abandoné esa idea por muchos años, hasta que decidí abrir un blog donde pudiera hacer un poquito de “eso” que tanto amaba.

En mi mente de muñequitos yo era la única dominicana que hacívideos para internet, pues todo lo que veía en YouTube en ese momento, era en inglés y también pensé que en cosa de 3 meses ya yo iba a ser reconocida y me iba a ir bien con mi proyecto, pero como todo en la vida, como todos los sueños, hay que trabajar muy duro para conseguirlos. Fueron muchas las veces que pensé esto no era para mí, que algo yo hacía mal que poca gente veía mis videos, me concentraba más en los números que en la calidad de esos “pocos” que me veían y dejé de hacer videos, decepcionada, no sabiendo qué hacer con mi vida y pensando en buscar un trabajo de 8 a 6 que me permitiera llevar dinero a la casa. Yo también perdí el norte y no supe qué hacer con mi vida.

Es un mal que todos vivimos, en esencia, todos sabemos lo que queremos ser, pero no siempre encontramos el camino, no siempre sabemos cuáles pasos dar, qué puertas tocar, qué piezas mover, pero lo importante es siempre mantener el norte de lo que queremos ser o hacia dónde queremos ir.

Yo aún no sé cómo voy a conseguir esa meta, aun no sé cuales pasos precisos dar, pero tengo la completa seguridad de que quiero inspirar la gente a vivir plenamente con lo que tiene, a que aprendamos que sí somos perfectamente imperfectos, que no debemos parecernos unos a los otros y que la esencia vale siempre mucho más que las apariencias.

Quiero que entiendas que está bien estar mal, que todos tenemos días oscuros en los que perdemos la fe, el enfoque, la esperanza, pero que debemos continuar siempre luchando por recuperar esas cosas vitales que nos permitirán una vida llena de momentos felices.

Yo voy dando pasos a ser la mujer que sé, quiero ser y quiero que me acompañes, que mires en mí tu reflejo de que aun en los momentos más oscuros, hay un rayito de luz que nos permite continuar.