Cuando inicié
este proyecto mi idea era muy diferente a lo que tengo ahora, nunca mi intención
fue hablar de #MiMisma, ni mostrar solo lo que me ponía todo el tiempo, la idea
era reportar de temas variados y personas variadas. Yo no quería ser
“Egoblogger”
Si se van a mis artículos muy
antiguos, escribía de todo, mostraba lugares, tendencias y siempre estuvieron
como foco principal las entrevistas. Pensaba yo, de ilusa, que éstas
serían fáciles debido a la era de la tecnología, ya que no necesitamos tener a
alguien físicamente presente para hacerles unas cuantas preguntas; pero cuando
los egos, la fama y la frustración por la “competencia” priman en este moderno
mundo, descubrí otra realidad.
En octubre pasado cuando les
publiqué
ESTE ARTÍCULO
sobre los mitos de ser influencer, les confieso que le escribí a más de 20
personas del medio, incluyendo algunas que conozco personalmente y pues en él
pueden leer cuántas me contestaron. Muy pocas, pues la realidad es que
muchos piensan que si “aportan” con un pequeño párrafo a una blogger y/o
instagramer más pequeña que ellos, les están brindando notoriedad. Sí,
aunque se lea feo, así funciona.
Muchos piensan que detrás de una
entrevista o un reportaje, hay una intención de “buscar mention” del pequeño
blogger, y realmente hay muchos así, pero como siempre, generalizar no es
bueno. De los artículos que más disfruto hacer, mi cara no sale.
En el 2013 creé
para esta plataforma, o por lo menos en
mi mente, una especia de revista de variedades, donde como dije, se hablara de
todo un poco y mi presencia estaría más en la redacción del contenido que en mi
imagen; por supuesto que yo quería modelar y también darme a conocer, pero no
solo por mi cara, sino por mis talentos y lo que podría aportar a la industria
de la moda de tallas grandes y al entretenimiento, pero no me quedó más
opción, para mantener vivo el blog que tanto me apasionaba, ser una egoblogger más. No me malinterpreten, no está mal ser egoblogger, por
el contrario eso lleva más trabajo y esfuerzo que lo que yo quería hacer y una inversión
(ropa y demás) que yo no puedo hacer; pero esa simplemente, no era mi meta.
Soy de esa gente muy curiosa que
quiere saber más allá de lo que a simple vista se puede ver y he descubierto
que en gran medida eso se debe a lo mucho que se mal entiende mi persona y mi
trabajo, por eso, siempre me gusta
conocer la persona detrás de la figura y fuera de las redes o las pantallas.
Por algunos años desistí de
cumplir esa meta de llevar un trabajo diferente y abrazada a ese miedo
infalible de “no molestar” me quedé con las ganas, pero como les
comentaba en mi PODCAST, quiero perder el miedo e ir paulatinamente abriéndole la
puerta para que salga y me deje dar esos primeros pasos.
Hay un segmento que creé a
finales del año pasado que se llama “Los trucos de” y pues aun espero la
respuesta al correo de la primera persona que yo realmente deseaba en él. Cuéntame
a quién
te gustaría que le preguntara sus trucos, no importa el área. Te leo en los
comentarios.
Por lo pronto, ruéguenle a Dios
que las demás blogueras respondan mis preguntas y así poder yo dejar de ser esa
egoblogger, que nunca decidí ser.
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